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SOLICITADA

Hace 35 años fallecía Osvaldo Balbín

El pasado domingo 12 de diciembre, se cumplió un nuevo aniversario de la muerte del por entonces Intendente Municipal de Salliqueló.

Solicitada por el 35 Aniversario del fallecimiento de Osvaldo Balbín

 

Amigos y correligionarios

Voy a compartir con ustedes más de una década de momentos vividos con quien hoy homenajeamos. Los hechos que se sucedieron en esta suerte de paralelismo en absoluto intentan robar protagonismo a quien recordamos, Osvaldo Balbín, quien desapareció hace 35 años.

Amigo, correligionario y colega; reformista, luchador, solidario, honesto, desinteresado y podría continuar con las numerosas virtudes que desarrolló durante sus cincuenta años de vida.

Cuando ingreso (yo) a la facultad de medicina, él comenzaba su tercer año. Era 1955… 12/13 de mayo “Huelga por compañeros detenidos”, convocada por A.D.E.R. (Agrupación de estudiantes reformistas), a partir de allí y hasta nuestras respectivas graduaciones, numerosos acontecimientos, locales y nacionales, se suceden y comienzan con la caía de Perón.

Después de septiembre, las asambleas, las impugnaciones, el regreso de compañeros exiliados, escondidos, reincorporaciones, imprimen una vorágine de sucesos del quehacer de la vida universitaria, al igual que ocurría en el país, eran vivencias que nos marcaban para toda la vida.

Inmediatamente ocurren dos hechos importantes:

- La derogación de la enseñanza religiosa obligatoria instalada en las escuelas públicas en 1943.

 

- La sanción de la ley universitaria que sancionaba el gobierno tripartito de las Universidades Nacionales (eran 7). Se reglamentó a partir de 1958.

 

Intensas actividades, además de las Universitarias, la del radicalismo, su separación, la constituyente de 1957, con la sanción del artículo 14bis, Crisólogo Larralde. A partir de la división de UCR y la elección en 1958, Frondizi-Gómez Vs. Balbín-Del Castillo. Osvaldo participaba, acompañaba, recorría e intervenía.  Junto a otros amigos informaba, difundía, intercambiaba ideas y nos actualizábamos.

Participamos en la importante e inolvidable marcha al congreso de la Nación en contra de la Ley que permitía la creación de las Universidades Privadas y la correspondiente expedición de títulos, artículo 28.

1960 FACULTAD DE MEDICINA TOMADA POR LOS ESTUDIANTES, HUELGA Y 90 DÍAS CERRADA, CONTRA LA INTENCIÓN DE CUPO AL INGRESO DE PRIMER AÑO. Intervención de la Facultad y también del Centro de Estudiantes.

Soy electo presidente de dicho centro con más del 50% de los votos. En la facultad de Derecho, Enrique Balbin, el hermano de Osvaldo, también electo presidente; con dos Centros de Estudiantes amigos, después de un año trabajando en los concursos de cargos desde Profesores Titulares, hasta ayudantes diplomados, con representación de los 3 claustros en los jurados, conseguimos la recuperación de la FULP (Federación Universitaria de La Plata), que desde hacía 5 años estaba dirigida por grupos defraudados por Frondizi y consiguientes acompañantes del PC. Resulto electo presidente de la FULP por 6 votos contra 5 del total de los Centros de Estudiantes. Osvaldo y el desaparecido Herardo Pinche Correa movilizaron a los amigos en pos de mi candidatura. Osvaldo se incorpora al servicio de Cirugía del Profesor José María Mainetti para comenzar, ya recibido, la especialización.

Ingresa como Cirujano de guardia del I.G.D.A.  Don José de San Martín de La Plata. Varios condiscípulos lo recuerdan hoy día por sus cualidades, destrezas y aptitudes con elogios.                          

Después de la reorganización de la Facultad de Medicina, año 1964, Osvaldo es secretario Académico de la Facultad.

1965, Osvaldo es designado secretario general de la UNLP.

1966, caída de Illia. Asume el General Onganía. Con triste avasallamiento de las Universidades Nacionales y hechos sangrientos en la UBA.

Hacia el final de ese año, Osvaldo, Marta Berisso (esposa), Víctor Alberto Verón, salimos en auto a recorrer ante el “Panorama Nacional” la provincia de Buenos Aires, para desarrollar nuestras actividades médicas como simples ciudadanos. Primera escala: General Villegas, él permanece casi 3 años, allí nacen Eduardo y Analía, médico y odontóloga respectivamente. Posteriormente se traslada a Salliqueló. Allí nacen Fernando y Emiliano, abogados.

1983 intendente de Salliqueló hasta su muerte.

Osvaldo Balbín fue un luchador incansable en cualquiera de las dimensiones; como ciudadano, ejercía sus derechos, tanto para reclamar por las injusticias, los desvíos y los excesos; cuando de cumplir con los deberes se trataba, era el primero en dar el ejemplo. La prueba más palpable y evidente fue la elección interna en la que participó, para su reelección del período 87 – 91.

Le faltaron unos pocos centésimos de los dos tercios necesarios, le ofreció el contrincante renunciar para allanar su candidatura. TERMINANTEMENTE SE OPUSO, transparencia, rectitud y cumplimiento de las normas.

Este era Osvaldo Balbín. Ante las vivencias actuales que ofrece el espectáculo político, cuantos Osvaldos necesitaríamos para adecentar la participación de los hombres en beneficio de la Republica.

Amigo, descansa en paz.

 

Raúl Pistorio.